Que el PIT-CNT convoque a un PARO GENERAL de 24 horas y a un Plan de Lucha, por salario mínimo igual a media canasta familiar ($ 25.000)
La discusión del Presupuesto estatal ha dejado bien en claro que el Frente Amplio se niega a aumentar el gasto en educación y en salud pública, a subir los salarios de los trabajadores públicos, para asegurar el pago de la deuda externa, los subsidios a los grandes capitalistas y el apoyo del FMI y las calificadoras internacionales. Es falso que “no hay dinero”: el problema es quién controla la bolsa.
Esto significa que estamos ante un gobierno capitalista, que mantiene la miseria salarial para asegurar las ganancias de los banqueros y las multinacionales.
La desafiliación por parte de ADEMU de algunos ex sindicalistas que ocupan cargos en el gobierno revela una conciencia profunda: no se puede estar de ambos lados del mostrador. O se está con el gobierno sometido al FMI, o se está con la lucha de los trabajadores.
El petitorio para que un legislador gane lo mismo que un docente también es profundamente clarificador, ya que denuncia al conjunto de los partidos y al régimen de conjunto, donde los carreristas políticos que se aseguran sueldos principescos son los mismos que votan el hambre para las familias trabajadoras. Este petitorio tiene además el glorioso antecedente de la Comuna de París, que estableció el principio de que nadie que ocupara un cargo de gobierno podía ganar más que un obrero.
Los trabajadores de la Educación no están solos: próximamente iniciarán una huelga los trabajadores de la Salud Pública, que también son olímpicamente ignorados por el gobierno del Frente Amplio. Se va haciendo realidad una consigna cantada en las marchas: “Todos a la huelga general, para que vean, que este pueblo no cambia de idea, pelea y pelea por la educación popular”. El camino para triunfar es la generalización de la lucha. Es necesario exigir al PIT-CNT que deje de subordinarse al gobierno, y convoque a un PARO GENERAL DE 24 HORAS y a un PLAN DE LUCHA para conquistar las reivindicaciones.
La primera consigna unificadora es el Salario Mínimo equivalente a media Canasta Familiar ($ 25.000) un reclamo que unifica a la enseñanza, la Salud Pública y los municipales de Canelones, y que debería ser tomada por todo el PIT-CNT, en lugar de levantar la miserable demanda de ¡10.000 pesos! como salario mínimo.
El gobierno y las patronales ya han marcado la cancha poniendo techos a la negociación salarial por los convenios del sector privado (construcción, metalúrgicos, etc.). Para romper esas pautas es necesario unificar la lucha de toda la clase obrera.
Esta huelga ha demostrado la necesidad de cambiar a las direcciones oficialistas e instalar la soberanía de las asambleas de trabajadores en lucha; también ha demostrado la posibilidad de recuperar los sindicatos para los trabajadores –como está sucediendo desde abajo en FENAPES, en ADEMU, etc.– desmintiendo el pregón desmoralizador de quienes se pasan convocando a desafiliarse de los sindicatos y del PIT-CNT.
En ADEOM, en ADES, en AFCASMU, en UTHC, en el Frigorífico Canelones, y en otros sindicatos, son derrotadas las listas oficialistas y triunfan quienes se declaran independientes del gobierno frenteamplista. Es necesario extender este movimiento por la independencia política del PIT-CNT y los sindicatos.
La lucha de la educación ha puesto al desnudo que los trabajadores carecen de representación política. Todos los partidos parlamentarios están sometidos a la dictadura del FMI, los banqueros y el gran capital. Es necesario construir una alternativa anti-capitalista y socialista, que tenga expresión en las próximas elecciones: por una bancada de trabajadores que represente e impulse la movilización popular, utilizando la tribuna parlamentaria para preparar la lucha por un gobierno de trabajadores.
En lo inmediato impulsemos un gran movimiento por la independencia política del PIT-CNT, que se exprese en una campaña desde todos los sindicatos por un PARO GENERAL DE 24 HORAS y un plan de lucha que lleve al triunfo las reivindicaciones populares.