Juan Vital Andrada 1932-2020
Su segundo nombre siempre fue motivo de broma, porque lo describía a la perfección. “Juan Vital y Móvil”, le decíamos por ejemplo quienes éramos más jóvenes pero casi siempre menos activos que él, que era una locomotora imparable cuando militaba.
Nacido en Fray Bentos, maestro y militante de la FUM (magisterio), vivió luego en Rivera, donde militó en el Partido Socialista. Juan venía de una familia batllista, pero el conocimiento de la realidad rural y el impacto de la revolución cubana y de las luchas obreras y campesinas en toda América Latina lo llevaron al marxismo. Ya en 1962 fue candidato a intendente en Rivera, por la alianza “Unión Popular” que integró el PS junto al grupo de Enrique Erro, siendo ya desde muy joven un militante reconocido.
Dentro del Partido Socialista se integró a la fracción que conformaría el MUSP (Movimiento de Unificación Socialista Proletario), una corriente que criticaba el reformismo del PS y a la burocracia estalinista. El MUSP se definía como leninista, y aunque recibía influencias del maoísmo, también leía a Trotsky y tomaba en parte su caracterización sobre la burocracia de la URSS. El MUSP rompe con el Partido Socialista (llevándose a gran parte de su juventud) en 1965. Era un grupo muy combativo, que fue fuertemente atacado y reprimido por el estalinista PCU, particularmente durante el 1° de Mayo de 1967 cuando esta corriente marchó denunciando a la burocracia sindical. Por discrepancias en el seno del MUSP, a fines de los ’60 se conformó el “Movimiento Marxista” (MM), en el cual militó también Juan, junto a Julio Louis y Magdalena Bertino, entre otros.
Juan mantuvo una destacada militancia en la Federación del Magisterio antes del golpe militar del 73, y durante la huelga general contra el mismo. Militó clandestinamente contra la dictadura en el MM y en los CRAF (Comités de Resistencia Anti Fascista), debiendo emigrar a la Argentina con su familia para evitar ser detenido. En Buenos Aires continuó militando contra la dictadura, y conformó la AROJA (asociación de uruguayos residentes en la Argentina) junto a otros perseguidos por el régimen militar. Fue en la vecina orilla que Juan y otros militantes provenientes de Uruguay entraron en contacto con la organización Política Obrera fundada por Jorge Altamira (luego legalizada en 1983 con el nombre Partido Obrero), adhiriendo al trotskismo. Fue de esa forma que se fundó la organización “Socialismo Revolucionario” que adhirió a la “Tendencia Cuarta Internacionalista” que habían conformado el PO y el POR boliviano (Lora). Juan militó clandestinamente en Buenos Aires dentro de Política Obrera, y al mismo tiempo contribuyó con la conformación del SR y luego del PT.
Precisamente en 1984, cuando luego del “pacto del Club Naval” el régimen militar convoca a elecciones, el SR emprende una campaña relámpago para lograr la legalidad y poder participar en las mismas. En dos semanas se juntan más de 14 mil firmas, y Juan Vital Andrada -junto a la obrera textil Alicia Santamaría- encabeza la fórmula presidencial del PT. Digamos de pasada que Alicia fue una de las que organizó el sindicato de ILDU durante la dictadura, y lideró la primera ocupación de fábrica tras la huelga de 1973, cuando el 4 de enero de 1984 ocupó esa textil – lucha que empalmó con otras huelgas que surgieron en esos días (TEM, Pesca, transporte) y condujo a la primera huelga general de 24 horas contra la dictadura el 18 de enero de 1984. El SR y el PT participaron activamente y en forma destacada en la lucha contra la dictadura y la reconstrucción de los sindicatos, los gremios estudiantiles y la federación de cooperativas de vivienda por ayuda mutua (FUCVAM). Muchos de sus militantes integraban en representación de sus sindicatos el Plenario Intersindical de Trabajadores (PIT) que nace en mayo de 1983, así como los gremios de estudiantes nacidos a la legalidad bajo la ASCEEP. En las elecciones de noviembre de 1984 en las listas del PT figuraba el presidente de la FUCVAM (Gustavo González), un integrante del Secretariado del PIT-CNT (Juan Carlos Asencio), y muchos militantes destacados del PIT, FUCVAM y ASCEEP.
En las redes puede visualizarse la proclama leída por Juan Vital Andrada en la televisión nacional en representación del PT en las elecciones de 1984, denunciando el pacto del Club Naval.
Guarda total vigencia del planteamiento que denunciaba cómo la “democracia” nacía de un pacto que preservaba a la camarilla militar y a todos los pactos con el imperialismo, empezando con el reconocimiento de la deuda externa. Sólo el PT planteó ya desde sus inicios la anulación del pacto del Club Naval y la convocatoria de una asamblea constituyente libre y soberana, cosa que fue rechazada por todos los partidos “democráticos” e incluso “socialistas” -como denunciaba Juan en su discurso televisado.
Además de una intensa militancia en el Partido de los Trabajadores, Juan mantuvo su activismo en el gremio del magisterio, incluso luego de su jubilación, siendo un referente para muchos compañeros hasta el día de hoy. También organizó una coordinador de jubilados en la zona del Reducto (COBAJUPEN) y tuvo una destacada militancia vecinal. Cuando cerraba el Hospital Español (privado), encabezó junto a los jubilados de la zona y los propios trabajadores una lucha para evitar su cierre. Durante muchos meses encabezó la campaña por un hospital estatal y gratuito para los trabajadores y jubilados de la zona, y esta lucha condujo a la estatización del Español y su integración a ASSE (administración de la salud estatal), no sólo manteniendo sino incluso generando nuevos puestos de trabajo. Los trabajadores del Español enviaron un reconocimiento a Juan Vital en 2013 cuando se enteraron de sus problemas de salud.
Un momento memorable fue cuando en su calidad de candidato a Presidente del PT en 1994 le espetó al Coronel Silva Ledesma el epíteto de “juez de la muerte”, retirándose de un debate organizado entre varios partidos, acusando al responsable de la represión contra los militantes populares y la izquierda, para no dar “la apariencia de un debate civilizado” con un representante de los genocidas.
Otra instancia que es imposible olvidar, entre las muchas facetas de la lucha de Juan, fue su participación en las movilizaciones contra BOTNIA (hoy UMP) en su ciudada natal Fray Bentos. Juan encabezó la delegación del PT a los distintos “abrazos” en el punte sobre el Río Uruguay, en la solidaridad con la movilización de la población de Gualeguaychú, y en la denuncia pública contra la pastera contaminante.
En abril de 2013 sufrió un ACV. Había estado militando ese mismo día, llevando un periódico del PT a una compañera en el CASMU (asistencial de salud). Militó hasta el último instante que le permitió su cuerpo y su mente, ya que no pudo recuperarse totalmente de su enfermedad.
Juan militó siempre con una sonrisa para todos los compañeros, luchaba con alegría y buen humor, lo que generó un gran reconocimiento incluso en militantes de otras corrientes a las cuales él combatía sin concesiones, en defensa de un programa revolucionario y socialista. Fue parte de una generación impactada por la revolución cubana, pero a diferencia de otros que luego se integraron a la gestión del Estado capitalista, Juan Vital Andrada encarnó la lucha por el gobierno obrero y por la revolución socialista internacional, que fue siempre su bandera y su horizonte. Hasta la victoria siempre, Juan Vital!