El déficit fiscal ha trepado a un 5% del PBI, desmintiendo los pronósticos del gobierno.
El gobierno ha venido sosteniendo el peso en relación al dólar (mantenimiento del atraso cambiario) emitiendo bonos de deuda, lo que desmiente que no estemos ante un endeudamiento exponencial a futuro, aunque hoy ya toma casi el 50% del PBI, hay quienes consideran que es más. Hay una sequía de inversiones, y la recesión económica avanza
Los candidatos y partidos con posibilidades de ser gobierno, son conscientes que esto es una bomba de tiempo a mediano plazo y que es un absurdo pretender controlar localmente la economía.
Es decir, la batalla comercial internacional, es una guerra económica de los grandes bancos y corporaciones capitalistas para extinguir competidores de los mercados, ya que asistimos a una crisis de sobreproducción a una caída de precios y la imposibilidad en grandes franjas económicas, de concretar la ganancia capitalista, salvo destruyendo fuerzas productivas y recursos naturales, lo que adelanta un escenario de convulsiones sociales seguras
Responden a esta lógica, las guerras en curso Palestina, Siria, las intervenciones acompañadas por los gobiernos como el nuestro en Haití, o en el Golán, los incendios en la Amazonia, la destrucción de nuestro monte nativo para el monocultivo sojero y de la madera, este último acompañado de los contratos coloniales con las multinacionales pasteras, como se registra hoy con UPM.
El ingreso al escenario del default argentino revela que desde los gobiernos imperiales intervienen modificando el valor de las monedas, las tasas de interés de las casas centrales, es decir alientan la quiebra y la fuga de capitales para intervenir en los procesos económicos, políticos y sociales, a su favor. Es más, condicionan los procesos electorales, generando a través de condiciones económicas de mayor sojuzgamiento y entrega nacional.
El ejemplo es que Macri no se sabe si llega a octubre y que Fernández va a tener que aceptar el reperfilamiento de deuda que exija el FMI, en condiciones sin salida, es decir el FMI decreto el default, la fuga de capitales es imparable y la crisis económica y política también. En días se produjo ya una inflación del 30%, que barrió con todos los ajustes salariales pactados en las paritarias sindicales en la vecina orilla.
Cuando vez las barbas de tus vecinos arder, pon las tuyas en remojo
En el 2001, muchos decían, desde el gobierno de Batlle hasta el propio Astori, que Uruguay no era Argentina, que estábamos blindados En menos de lo que canta un gallo se produjo una devaluación y la inflación alcanzo en dos meses casi un 20 %, se instaló el corralito y se vaciaron los bancos saliendo el Estado a socorrer a los capitalistas y quedando los trabajadores en la miseria. Todos recordarán que los únicos que no tuvimos salvataje fuimos los trabajadores. El Intendente Arana violó el convenio colectivo porque debía, por mandato de éste, ajustar el 19,74 que correspondía de inflación a cuatro meses de haberlo firmado.
Todos los candidatos y partidos con posibilidades de ser gobierno ya están anunciando sus compromisos con UPM , las multinacionales que parasitan en el estado y succionan al estado a través de la obra pública, obviamente , todos anuncian honrar la deuda con los acreedores privados y organismos internacionales. En pequeño, observemos el endeudamiento de la I.M con el Fondo Capital (préstamo de Novick) y la CDN para producir en Montevideo obras de vialidad a granel, y verter esos fondos a los Grinor y cia, entre otros y a unos meses de las elecciones.
Dichos candidatos afirman en su campaña estar comprometidos con la entrega de las empresas y servicios públicos, en manos del estado, a las empresas capitalistas.
No solo los neoliberales o conservadores, ha sido notoria la defensa del “progresismo” del slogan de la “participación público /privada”, su entrega progresiva de lo estatal a lo privado, tenemos los ejemplos de la IM, pero también en todas la áreas del estado incluida por supuesto la educación pública.
Todos también se han comprometido a modificar la ley de jubilaciones, para que tomen nuestros ahorros previsionales y nuestras actuales condiciones de jubilaciones como variable de ajuste desde donde enmendar el déficit fiscal y el pago de la deuda, se han comprometido a mantener las AFAPs y a modificar las leyes de negociación colectiva y el derecho de huelga a favor de los patrones y el estado.
No es un patrimonio de “neoliberales” y “conservadores”, como dijo la conducción oficialista del PITCNT a través de su orador Marcelo Abdala en el último acto. Es decir no sólo está escrito en la prensa o grabado en entrevistas, ha sido la forma de gobernar del actual gobierno y para muestra basta un botón:
Esencialidad, desalojo de ocupaciones, prohibición del control obrero, aplicación del artículo 401, consagración de un derecho laboral a medida de UPM; donde dicho acuerdo, delata que el acuerdo laboral macro con los finlandeses, está más a la derecha que la pretensiones de la cámaras patronales uruguayas de abolir la negociación por rama, acá el actual gobierno convalidó un acuerdo macro contra la legislación laboral nacional sin haber todavía trabajadores en la empresa. Un centro servido a las patronales nacionales y multinacionales para que digan, “todos queremos ser UPM”.
El “paro” parcial del PIT -CNT
El paro general de 24 horas del 25 de julio, fue propuesto por ADEOM dos meses antes como un paro contra las cámaras patronales pero también contra el gobierno, que contrataba rompehuelgas en limpieza de Montevideo y además dejaba sin trabajo a los compañeros del gas, coartando el control obrero, permitiendo la fuga de Petrobras sin hacerse cargo de la empresa. La huelga general de los compañeros del gas reinstaló en la agenda el paro general nacional. Para la conducción oficial, éste, no estaba concebido como parte de un plan de lucha contra el plan patronal y fondomonetarista contra los trabajadores sino como válvula de escape que permitiera reencausar al PIT-CNT en un seguidismo electoral tras el gobierno.
Este último paro parcial, realmente, delata que no fue concebido como medida de lucha contra las patronales y el gobierno, todos los resortes de la economía siguieron funcionando. La banca, el puerto, el transporte, todo el agronegocio, siguió funcionando ya que el paro fue metropolitano, y con excepción de algunos gremios ADEOM que paró 24 horas por su plataforma contra la política precarizadora, privatizadora y antisindical del gobierno “progresista” de Montevideo, el paro y acto contrariamente quiso ser un acto funcional al gobierno y a su reelección.Y fue votado por toda la dirección del PITCNT con esas características.
Lo único que desvirtuó ese objetivo del oficialismo del PIT-CNT, aunque parcialmente, fue la intervención de ADEOM con el paro de 24 horas y la oratoria disonante de Ripoll, que denunció al conjunto de los gobiernos departamentales (que son de todos los partidos) y a el gobierno nacional y reclamo la independencia del PITCNT de estos, así como la necesidad de organizar la lucha contra el ajuste capitalista que se avecina.
La dirección del PITCNT encabezada por el PCU, Articulación y el PS realizó el acto para cancelar las movilizaciones contra el ajuste y el gobierno, la nota discordante en el acto como dijimos fue Ripoll, pero EN Lucha, así como el grupo de los 8 no se presentaron a la cita como un elemento superador de la tregua de la burocracia, ya que no plantean una acción independiente de lucha y ese el centro de la cuestión.
UPM avanza inexorablemente junto a su tren, (y hasta el gobierno reprime las manifestaciones contra esta), los candidatos Martinez, Talvi, Lacalle tienen un acuerdo para ir contra las jubilaciones y pensiones, un acuerdo para ajustar a los trabajadores pero no hay un planteo de luchar para imponer la plataforma de los trabajadores, desde el PITCNT toda la dirección practica un seguidismo electoral o apoyando abiertamente al gobierno o congelando la lucha la práctica.
No tenemos nada que esperar de las elecciones de octubre, ni de noviembre, solo podemos esperar de nuestra lucha independiente y unitaria como clase obrera y trabajadores.
Impulsamos un gran reagrupamiento de sindicatos y organizaciones de lucha de los trabajadores que tome la bandera de la independencia de clase y de los reclamos más elementales de los trabajadores:
Aumento general de salarios, ningún despido, reducción de la jornada laboral sin merma del salario, que se estatización de toda empresa que cierre bajo control de los trabajadores (como la ex Petrobras), no a las privatizaciones de las empresas y servicios públicos, defensa del derecho de huelga y la negociación colectiva, defensa de las jubilaciones y fin de las AFAPs.
Fuera la ley de riego, declarada inconstitucional. No a los contratos coloniales y antisindicales como UPM.
Que la crisis la paguen los banqueros y capitalistas, sus responsables.
Por un congreso extraordinario de delegados de base del PITCNT para organizar un plan de lucha para derrotar el ajuste capitalista y del FMI contra el pueblo trabajador.
Por una alternativa política de los trabajadores. Por el gobierno de los trabajadores
