El día de ayer jueves 14 se realizó una concentración contra la Ley de Urgente Consideración (LUC) frente al palacio legislativo.
A pesar de la pandemia y la campaña de desmovilización sostenida permanentemente desde todas direcciones unas tres mil personas se hicieron presente con las debidas precauciones de las circunstancias. La convocatoria corrió a cargo de Ades montevideo, el sindicato de artes gráficas, varios centros de estudiantes, la Plenaria Memoria y Justicia entre otros.
A pesar de que hay grietas dentro los partidos en la alianza gobernante respecto a la LUC, este proyecto anti obrero ya está siendo tratado. Entre otras cosas el mamotreto va contra el derecho de huelga y legaliza el gatillo fácil. Todo esto en el marco de una gran crisis internacional que tiene en jaque regímenes y gobiernos de todo pelo. La LUC representa un intento de la burguesía por sembrar el terreno para poder salvaguardar sus intereses ante un futuro que ve incierto.
Mientras tomaba forma la manifestación ocurrió un incidente ampliamente cubierto en los portales de noticias. Descendiendo hasta la avenida se acercaron Argimon y Lema en nombre de las respectivas cámaras. El objetivo según comentaron ellos mismos minutos después a un alcahuete que oficia de periodista era invitar al grupo a hacer sus planteos dentro del recinto en una de las comisiones creadas y que habrían recibido por respuesta que los organizadores “no estaban preparados”. El relato sobre una pretendida disposición al diálogo se transformó en una provocación en menos de lo que se tarda en pestañear. Este montaje buscó distorsionar el foco de la noticia en horario central: la importantisima concurrencia en medio de un bombardeo sostenido contra cualquier acción de protesta.
A todo esto la burocracia debería tomar nota. Las corrientes que dirigen el movimiento sindical se han acoplado sin fisuras al planteo de “tender la mano” que el FA le hace una y otra vez al gobierno. En el leguaje de Fernando Pereira un “diálogo social”, dándole gobernabilidad a Lacalle. Tanto el primero de mayo como ayer, se vio un ánimo de salir a las calles por parte de todo un sector incluso afín al frente amplio. Esa base ha sorteando la intentona paralizante de los acuerdistas por confinarlos a la protesta virtual.
El 20 de mayo y la movilización fijada para el 4 de junio por parte de la Mesa Representativa del PIT-CNT son los próximos mojones.
Para derrotar la LUC y a sus impulsores y cómplices es necesario que la clase obrera se ponga de pie.
Lo mismo para asegurar la salud de la población, tanto en los lugares de trabajo como en el barrio. Es un programa incompatible con la presencia de una burocracia cobarde que procura un acuerdo nacional con los que quieren descargar toda las penurias contra la clase obrera.
Abajo la LUC represiva y antiobrera
La pandemia es una farsa;para reorganizar el capital en el mundo y alinear a los gobiernos detrás de esa estrategia .¿Que alguien me diga cuando se hizo un senso de muertos por país antes ? Aquí en nuestro país la primer medida;no fue sanitaria fue económica para ahogar al pueblo y desmovilizarlo.