El jueves 5 de mayo se estableció por parte de la Federación Papelera (FOPCU), un paro general parcial de 9 a 13 horas en todo el país, el Centro de Papeleros Mercedes, acatando y apoyando dicha medida decidió que pararan todos los procesos. A la hora 10 un ómnibus nos esperaba a las afueras de la planta para dirigirnos a UPM, donde nos estaríamos concentrando por el no avance de los Consejos de Salarios.
De regreso a PAMER, y aguardando por el reinicio de actividades a la hora 13:00, se nos comunicó que aquellos compañeros que trabajamos en procesos continuos no podríamos ingresar hasta el día lunes, medida que ya viene tomando la empresa desde hace varios años en cada instancia de paro, no solo en aquellos que son propuestos por la Federación Papelera, sino también por aquellos paros parciales que son decretados por el PIT- CNT; violando de esta forma los convenios colectivos firmados con anterioridad.
Asamblea y ocupación
Previendo esta postura autoritaria por parte de la empresa se convocó a una asamblea en las afueras de la planta. Se resolvió autorizar la afiliación de compañeros que superen los dos contratos, ya que los mismos no podían ser afiliados hasta tanto la empresa no les otorgara la efectividad. Situación por la cual la empresa hábilmente juega con los compañeros a los cuales mantiene por 7 u 8 contratos, que pueden llegar a el equivalente de entre dos y tres años, según sean los contratos de tres o seis meses; no contando en ese lapso con un respaldo sindical. Cabe aclarar que de un total de 250 trabajadores, unos 70 son eventuales. La asamblea votó que ningún trabajador afiliado ingresaría a trabajar hasta el día lunes; realizar la denuncia en el MTSS y ocupar PAMER inmediatamente.
La ocupación se realizó de forma pacífica retirando a todos aquellos trabajadores que permanecían en sus puestos de trabajo y continuó durante todo el fin de semana. Esta es una semilla que ha germinado y que seguramente dará sus frutos en un futuro cercano, y echará raíces en nuestro Centro Papelero de a cara a las próximas movilizaciones, forjando la unidad y la lucha.
Una batalla que recién comienza
Esta movilización fue tan solo el inicio de la lucha que venimos dando en los consejos de salarios, contra las pautas del hambre que plantea el gobierno, en la cual se está estimando de un 7 a 9 % de aumento anual, cuando debemos recordar que sólo la inflación pasada llegó a un 10%, con ajustes semestrales; lo que lleva a más pérdida de salario. Además se sugiere desde el gobierno que el IPC, se reajuste cada dos años, y no anualmente como se ha venido haciendo, estrategia que no haría más que bajar el poder adquisitivo de cada trabajador.
¿Tenemos que pagar la crisis que deviene de esta sociedad capitalista en la que estamos insertos? ¿Tenemos la culpa de que las exportaciones bajen? ¿Somos culpables de que las materias primas que produce el país se desvaloricen? ¿Debemos condicionar nuestra vida al libre juego de la oferta y la demanda? ¿Somos responsables de la suba del dólar? El gobierno del FA sólo se ha encargado de asegurar y garantizar más a los grandes empresarios y terratenientes de nuestro país que a la clase trabajadora, la cual sigue sumergida. Estas decisiones que toma el gobierno no hacen más que encajonar a los trabajadores, agudiza la explotación y nos muestra visiblemente quienes deberemos pagar la crisis. Muestras claras de ello han sido las subas de luz, agua, teléfono, etc.: las “pautas del hambre” que marcan claramente en los consejos de salarios la línea para cual estratégicamente está dirigiéndose el gobierno, ninguneando a la clase trabajadora.
Martín Castro