Javier Iglesias
Todo parece indicar que el 2015 será un mojón histórico en el desarrollo de la educación pública estatal de nuestro país, la aprobación del nuevo presupuesto estatal y la inminente imposición de una nueva reforma educativa (cuyos detalles se discuten en absoluta reserva), se presentan como dos cruciales frentes de batalla para los trabajadores de la ANEP.
En este contexto se desarrollaron las elecciones del sindicato de profesores de la capital, un sindicato que acaudilló la lucha docente de 2013 realizando la primer huelga docente contra un gobierno del FA y “contagiando” a los otros sindicatos de al enseñanza. Para el FA y su gobierno era vital recuperar el control político de la comisión directiva de ADES que en mayo de este año ponía a lección sus 7 cargos. Para el gobierno, la vuelta al redil frentreamplista de este organismo, hubiera implicado reducir el nivel de resistencia que generará la imposición de la reforma educativa “chilena” que pretende Vázquez.
Para cumplir este objetivo se presentó la LISTA 1, liderada por militantes del PCU acompañados por integrantes de otros sectores del FA, terminado el escrutinio, esta lista obtuvo 3 cargos de 7, por lo que seguirá siendo minoría ante las otras dos listas que integran la nueva comisión directiva y que responden a trabajadores de la izquierda no frenteamplista (listas 68 y 1996). Los militantes del PT integramos la Lista 1996 de la Agrupación 1º de mayo, un agrupamiento construido sobre la base de defender la independencia sindical de ADES y la aplicación de los métodos de lucha históricos de los trabajadores para combatir las políticas privatizadoras de la enseñanza. Esta lista propuso, militó y defendió hasta el final la huelga del 2013, siendo la única que logro crecer en su registro electoral comparando esta elección con la anterior y quedando a solo 9 votos de arrebatar a la lista 1 el primer lugar, situación inédita en este sindicato. Por lo tanto, la constitución de la nueva directiva de ADES representa un paso adelante en la preparación de un nuevo (y masivo) conflicto de la enseñanza para este año, los afiliados han confeccionado una comisión directiva pensando en pelear y oponiéndose a someter sus reclamos a los compromisos y objetivos del Frente Amplio y su gobierno.